miércoles, 19 de septiembre de 2012

Pueden beneficiarse de este tratamiento los niños con:

- Alteraciones del desarrollo como trastorno por déficit de atención e hiperactividad, problemas de equilibrio, marcha o manipulación, caídas frecuentes, torpeza, etc.
- Alteraciones neurológicas tales como parálisis  cerebral y daño cerebral adquirido, espina bífida y lesión medular, parálisis braquial obstétrica, enfermedades neuromusculares...
- Problemas ortopédicos: tortícolis congénita y plagiocefalia, alteraciones en columna vertebral, miembros superiores o inferiores, malformaciones congénitas y amputaciones.
- Síndromes pediátricos: osteocondrodisplasias, artrogriposis y síndromes genéticos.
- Niños en situaciones especiales: niños que han sufrido un retardo del crecimiento intrauterino, un período de hospitalización o institucionalización prolongado, niños con problemas oncológicos, quemaduras, recién nacidos pretérmino y de riesgo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puede realizar su comentario en este espacio si desea que sea público. También puede contactar conmigo por correo electrónico, para una consulta personalizada.